EL PISA CALLOS -
Por Rubben's Cassanova -
Con el pretexto de iniciar el proceso de entrega-recepción,
ayer se reunió Roberto Borge con Carlos Joaquín, y ambos presumieron las
fotografías de este encuentro que para algunos fue desconcertante y para muchos
más, decepcionante.
Tal parece esta reunión disfrazada de ‘civilizada’ no gustó
a quienes esperan un cambio real para Q. Roo. De hecho me salta aquella frase
de Don Diego Fernández de Cevallos: ’algunos políticos promueven el cambio para
seguir igual’.
A estas alturas, Roberto Borge es muy tóxico, al menos es la
percepción en las redes sociales, que por cierto, ya empiezan a imponer agenda
con más frecuencia, y tal parece que ayer el gobernador envenenó algo, o mucho,
a Carlos, pues los comentarios acerca de esta reunión son mayormente desfavorables, es decir, no fue bien vista porque
en Veracruz, Duarte y Yunes continúan enfrentados y la relación entre ellos
empeora. Y esa situación le da más certidumbre de cambio y justicia a los
veracruzanos que sienten no haberse equivocado en las urnas; mientras que un
apretón de manos entre el gobernador saliente y el entrante, ha causado un
efecto contrario en Q. Roo.
Pareciera que Roberto Borge y Carlos Joaquín han fumado la
pipa de la paz. Esto no es lo malo, lo peor es que de ser así, la impunidad
seguirá prevaleciendo y a la sociedad quintanarroense entonces la habrían
engañado, digamos utilizado por Carlos Joaquín sólo para ganar votos y habría `olvidado`
su discurso del por qué se fue a la oposición.
Que no se le olvide al ‘Chespi’ que la gubernatura la puso
muy alta y tiene que cumplir o el pueblo se lo va a reclamar en 2018.
Por el momento, todo indica que ‘Beto’ le ganó ayer otro
round a Carlos. O al menos esa es la impresión,
y bien dicen que en política, lo que parece, ¡es!
Al tiempo...
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